BIM es una metodología de trabajo colaborativo aplicada al sector de la construcción, una colección de datos de un edificio organizados para facilitar la gestión de proyectos de ingeniería, arquitectura y construcción consiguiendo mejoras en el resultado y eficacia en los procesos. Todos los profesionales implicados en un proyecto de construcción pueden trabajar sobre un único proyecto en tiempo real con acceso a la misma información.
Sus siglas responden a la expresión en inglés “Building Information Modeling” o modelado de información para la construcción, y permite definir y llevar a cabo los proyectos de construcción desde una perspectiva global e integrada, teniendo en todo momento presente la totalidad del proyecto de construcción del edificio en cada una de sus fases, desde su boceto inicial hasta su lanzamiento.
Son elementos que complementan al acero principal, entre los que se encuentran anclas, embebidos, elementos de conexión y soporte, etc.
Además comprenden a los elementos extras, como los barandales, cercas, escaleras, puertas, etc.
El modelado y el nivel de información que contiene un modelo arquitectónico BIM varía según la fase de diseño en la que nos encontremos en el proyecto. BIM es una herramienta colaborativa en la que todos debemos de hablar el mismo lenguaje. Cada elemento se proyectará con las herramientas específicas destinadas para ello, las ventanas se modelan con la herramienta ventana, y los muros con la herramienta muro, en caso de utilizar una diferente tiene que ser previamente comunicado al resto de agentes. Esto parece algo obvio, pero no es así y es causa de muchos inconvenientes y confusión en el desarrollo posterior del proyecto.